El establecimiento de la Fundación Educacional Coanil destaca por la gestión de transformar la percepción sobre la discapacidad, además de impulsar la inclusión en la comuna, convirtiéndose así en líder en educación especializada e integración social de la Región de Atacama.
“Cuando comenzamos con el proyecto en el año 2010, la comunidad no estaba habituada a ver a los niños y niñas con discapacidad intelectual en la calle. Era evidente la incomodidad y el desconocimiento. Estas experiencias nos impulsaron a replantear cómo podíamos cambiar esas miradas”, cuenta Katty Vega, directora de la Escuela Especial El Olivillo.
Gracias a un trabajo persistente, en estos 15 años el establecimiento de Vallenar ha dejado de ser un espacio apartado para convertirse en un referente de inclusión social y compromiso comunitario.
Uno de los pilares del éxito de la escuela ha sido la creación del Sello “Vida en Comunidad”, una iniciativa que promueve la inclusión como parte esencial de la vida diaria en Vallenar. A través de actividades como el Festival Coanil Canta, Ciclocueca, Un Poema a la Inclusión y colaboraciones con entidades públicas y privadas, el colegio ha consolidado su rol como puente entre la discapacidad y la sociedad.
Desde sus inicios la escuela ha mantenido un crecimiento constante. “Ahora nos incluyen en las actividades de la ciudad, tenemos una posición de liderazgo dentro de la comuna, y la gente apoya nuestros eventos. Gracias a nuestro esfuerzo hemos logrado un lugar en la comunidad de Vallenar y eso nos llena de orgullo”, concluye Katty Vega.
Innovación y logros
Entre los hitos más importantes de El Olivillo se encuentran la inauguración de la Sala Snoezelen, que la convirtió en la primera escuela especial de la Región de Atacama con este espacio multisensorial, diseñado para estudiantes con Trastorno del Espectro Autista (TEA), gracias al Fondo Emanuel.
Además, en el área cultural, consolidó su festival anual Coanil Canta, que ya suma 12 años como un ícono de inclusión en la comuna.
El Olivillo también ha sobresalido por iniciativas como “Un Poema a la Inclusión”, una actividad que ha reunido a estudiantes, apoderados y voluntarios en la creación de poemas sobre discapacidad, culminando en la publicación de un libro que fue declamado en el Centro Cultural de Vallenar, actividad que fue seleccionada y reconocida por el ministerio de educación en el marco del Programa “Buenas Ideas para una Mejor Educación” siendo la única escuela especial a nivel nacional que recibió este reconocimiento, lo que reafirma su compromiso con proyectos de impacto positivo y transformador.
Por otro lado, la campaña “Sin Filtro” centrada en la aceptación personal y el uso responsable de redes sociales, permitió a los estudiantes de El Olivillo convertirse en protagonistas al inspirar a escolares de educación básica a valorarse tal como son.
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